La soldadura TIG permite crear cordones de máxima calidad. Por un lado, el arco se quema entre un electrodo de tungsteno que no se fusiona y la pieza de trabajo en una atmósfera de gas libre de oxígeno. Por otro, el gas protector inerte evita que haya reacciones químicas con el baño de fusión líquido. Gracias a estos dos procesos, se obtienen cordones sin poros, nivelados y lisos.
Un ejemplo de cómo se utiliza el proceso TIG es la producción de depósitos para alimentos. Estos depósitos están fabricados en acero inoxidable al cromo níquel de alta aleación y no deben presentar marcas térmicas en la soldadura por oxidación de la superficie metálica, ya que se contaminaría su contenido. En este caso, el fabricante debe decapar la superficie. Sin embargo, este procedimiento es nocivo para el medioambiente y muy costoso. Es más conveniente mantener las marcas térmicas en la soldadura al nivel más bajo posible, lo que se puede lograr con la soldadura TIG.
Por razones higiénicas, es importante que los cordones de soldadura estén limpios, lisos y libres de proyecciones. Esta es la única forma en la que el fabricante puede garantizar que los depósitos sean resistentes a la corrosión y fáciles de limpiar. Cuando se suelda acero inoxidable con soldadura MIG se generan proyecciones y sobreespesor en el cordón de soldadura, y esto conlleva tiempo de lijado. Esto no ocurre con la soldadura TIG.
Incluso los depósitos fabricados en aleaciones de aluminio tienen altas exigencias para los cordones de soldadura. Entre estas exigencias está la protección con helio en cámaras herméticas. El helio es ligero y su difusión es especialmente rápida cuando hay una fuga en un depósito. La soldadura TIG es uno de los pocos procedimientos para la fabricación de contenedores herméticos con helio.
Cuando se utilizan en turbinas para el sector de la aviación o centrales eléctricas, los cordones de soldadura también deben ser a prueba de rayos X, es decir, no deben tener poros ni fisuras. Como las turbinas de gas deben resistir temperaturas de hasta 700 °C, se fabrican con aleaciones base de níquel o titanio. Con el gas inerte de tungsteno, es posible soldar estos materiales de modo que sean a prueba de rayos X. Cada cordón también se verifica mediante rayos X en la construcción de tuberías para centrales eléctricas. Las tuberías y, especialmente, los cordones de soldadura, deben resistir una alta presión. El proceso TIG garantiza los niveles de alta calidad necesarios para mantener estos elementos a salvo durante este proceso.